enfrentarse

Hoy desperté con el abrazo cotidiano de todos los días son iguales, de la vida te acaricia las piernas para que abras los ojos. Comenzar el día y resolver problemas de matemática 1, problemas que yo apliqué a la vida cotidiana. Empezando por ahí...
Le comenté de mis ganas de pertenecer a un universo paralelo favorito, de no dejar de pertenecer. Como esperaba, su respuesta no fue agradable. No quiere que pertenezca.
Le explico que mi universo paralelo favorito es como el lugar donde ella va cuando no sabe que-más-hacer, cuando pierde fuerza, cuando pierde esperanza. No va acompañada de nadie; no tiene madre, ni padre, fue abandonada hace unos años ya, pero sigue irradiando luz, sigue caminando, no se va a detener, y lucha. Lucha contra las adversidades de una vida jodida, lucha contra todos esos a los que es difícil comprender. Pero lo hace. O al menos lo intenta. Me gustaría que deje de gritar por dentro...