lunes, 1 de septiembre de 2008

cantata

Todo camino puede andar, todo puede andar...

Con esta sangre alrededor, no sé que puedo yo mirar... La sangre ríe idiota, como esta canción ¿y ante quién? Ensucien sus manos como siempre, relojes se pudren en sus mentes ya. Y en el mar naufragó, una balsa que nunca zarpó, mar aquí, mar allá. En un momento vas a ver que ya es la hora de volver, pero trayendo a casa todo aquel fulgor ¿y para quién? Las almas repudian todo encierro, las cruces dejaron de llover.
Sube al taxi, nena. Los hombres te miran, te quieren tomar... Ojo el ramo, nena, las flores se caen, tenes que parar. Ví la sortija muriendo en el carrousell, vi tantos monos, nidos, platos de café... Platos de café, ah!Guarda el hilo, nena, guarden bien tus manos esta libertad. Ya no poses, nena, todo eso es en vano como no dormir. Aunque me fuercen yo nunca voy a decir que todo tiempo por pasado fue mejor... Mañana es mejor! Aquellas sombras del camino azul ¿dónde están? Yo las comparo con cipreses que ví solo en sueños. Y las muñecas tan sangrantes están de llorar, y te amo tanto que no puedo despertarme sin amar, y te amo tanto que no puedo despertarme sin amar...
No, nunca la abandones, no... Puentes amarillos. Mira el pájaro, se muere en su jaula, no, nunca la abandones, puentes amarillos, se muere en su jaula, mira el pájaro, puentes amarillos.

Hoy te amo ya y ya es mañanamañanamañana

No hay comentarios: