onírico

hoy dormí toda la tarde y tuve todos sueños turbios, primero soñe con macumbas y cosas del tipo, había un viejo re consumidor de peyote, que degollaba unos pollos. había sangre y plumas... entonces aparecía mi hermano en una 4x4 con su ex mujer, mi sobrino y mis otros dos hermanos, me sacaban de la casa del viejo y me llevaban a algún lugar desconocido, era la casa de una curandera que tenía que contrarrestar lo que nos estaba haciendo el otro viejo con sus pollos y su sangre. De repente desperté y cuando me volví a dormir, soñe que entraba a hurtadillas en el consultorio de mi psicoanalista (bendita tu eres liliana), y había un perro color chocolate que me gruñia cuando me acercaba a los libros. yo tocaba timbre (así de confuso era, primero entraba y después tocaba timbre), y mi psicoanalista aparecía en bata y me decia; vos viste algo de lo que estaba pasando? y yo decía no, no, y me echaba del consultorio y yo me iba en patineta por las heras hasta boulevard y jamás llegaba, habia unos tipos en moto que me seguían la corriente, y aparecían los pendejitos de noveno y me decían que su amigo me estaba esperando en la plaza, yo iba a la plaza, y no había nadie, después aparecía ese amigo que me estaba esperando y yo le decía, ahora vuelvo. Iba con el palo de hockey hasta la shell y unos pendejos me bardeaban, empezabamos a discutir y yo los cagaba a palazos. Iba de nuevo hasta la plaza y me seguían, pasaba Noe caminando con su grupo del nuestra señora y yo no entendía, cruzabamos una mirada apática, no sé... en la plaza ya era de noche, estaba Anabel fumando un cigarro, yo le preguntaba que hacía, la plaza estaba muy oscura y había dos hombres y una niñita.
Anabel vamos para allá donde hay luz. Ella accedía. Me decía que estaba con la hija de una amiga, y era esa niñita, pero un hombre la estaba agarrando, ella forcejeaba, agarrabamos a la nena, y salíamos corriendo, nos querían robar, no sé, yo escribía algo muy bueno en el sueño, cuando desperté lo pense pero ahora no lo recuerdo, corríamos más y yo tropezaba en la oscuridad, la adrenalina aumentaba, desperté caliente y transpirada entre las sábanas.